Cada vez es más común encontrar plantas industriales que quieren integrar en su organización un sistema moderno de producción que integre a las personas a gestionar desde todas las escalas de la empresa.
El proceso de transformación lean, permite desarrollar cultura de mejora continua desde el manager, hasta el operario de línea, dando a cada uno su responsabilidad en cuanto a calidad, costes y servicio.
Cualquier proceso de transformación, tiene por objeto cambiar la cultura, pero también conducir indicadores globales de gestión para direccionarlos por el buen camino.
Es por ello, que para asegurar que el proceso de cambio va por buen camino, necesitamos valernos de algunos KPI’s des del inicio del proyecto. Éstos indicadores podrían ser:
Los indicadores citados anteriormente, hacen referencia a los 3 principales grupos de kpi calidad (Q), coste (C) y servicio (D).
El proceso de transformación, debe implicar un cambio a mejor de cada uno de ellos, por lo que debe realizarse una medición de éstos al inicio, establecer un objetivo de cada uno a 2-3 años vista y evaluar su evolución a lo largo del período de transformación.
Como decía William Edwards Deming: “sin datos, solamente somos una persona más con una simple opinión y por tanto, la decisión siempre quedará sujeta al azar”.