Hace unos días escuché en la radio que desde 2003 se genera en dos días el mismo volumen de información en el Mundo, que el que se produjo desde el principio de los tiempos hasta ese año. Este tipo de noticias te hace sentir como un granito de arena en el desierto y te deja desprotegido e inquieto ante el aluvión de información que manejamos, en forma de exabytes o petaflops.
Todos los que nos seguís y leéis en nuestro blog, sabéis de la importancia que le damos al hablar y gestionar con datos, basados en hechos contrastados, lo que los japoneses denominan genjitsu. Entendemos que es básico para gestionar de manera idónea nuestras empresas, por medio de dinámicas como la M de measure, del ciclo DMAIC del Six Sigma.
Pero ocurre que, en ocasiones, el volumen o número de datos que tenemos en cuenta es exagerado. Puede que ello ocurra por la propia naturaleza del negocio, o porque realmente estamos manejando cosas absurdas, de las que obtenemos datos absurdos, a través de indicadores absurdos.
El gráfico que ilustra es presente post está basado en una matriz para intentar ayudar en la decisión que hay que tomar para aclarar qué datos son los que nos interesan. Esta matriz está compuesta por dos vectores. El primero en el que verificaremos la necesidad o no necesidad del dato obtenido. Y el segundo, en función de la veracidad o falsedad de los citados datos.
Veamos cada uno de los cuadrantes de la matriz:
Para finalizar, con el objetivo de no indigestarnos, ,vamos a limpiar nuestras bases de datos, nuestros cuadros de mando, para hacer que nuestra vida profesional sea más sencilla y asequible, a la vez que mejor enfocada a que nuestra gestión sea también más eficiente. Lo de los petaflops se lo dejamos a los informáticos, que en nuestras empresas ya tenemos suficiente trabajo…